Así lo confirmó Alejandro Rechene, presidente de la Cámara de Comercio del Lago Puelo, quien detalló una situación dramática para comerciantes, productores y toda la comunidad local en LU 20 RADIO CHUBUT.
“Hoy no estamos teniendo temporada de invierno”, afirmó Rechene en diálogo con Federico y su equipo. Sin embargo, advirtió que la declaración de emergencia no se debe exclusivamente a la baja afluencia turística de esta temporada, sino a una suma de factores que vienen golpeando a la región desde hace al menos dos años.
Dos veranos perdidos y un invierno sin nieve
Según Rechene, las últimas dos temporadas de verano fueron un fracaso rotundo, en parte debido a los incendios forestales que azotaron la zona, limitando la llegada de turistas y generando altísimos costos económicos. “El turismo para nosotros es lo que el petróleo es para Comodoro. Si falla el turismo, falla todo”, sintetizó.
El invierno actual no trajo nieve y tampoco visitantes, lo que agrava la situación para una región que vive del turismo. A esto se suma la creciente competencia de destinos internacionales más accesibles. “Muchos argentinos están eligiendo Brasil, donde los precios bajaron mucho, y eso afectó directamente nuestras reservas y recaudaciones”, explicó.
Tarifas impagables: energía por las nubes
Uno de los factores más alarmantes que llevó a la declaración de emergencia es el aumento exponencial en las tarifas de servicios, en especial la energía eléctrica. Comercios pequeños enfrentan facturas de hasta 400 mil pesos, mientras que productores que requieren cámaras de frío para conservar fruta deben afrontar montos que llegan a los 6 u 8 millones de pesos mensuales.
Rechene graficó la desesperación con un caso concreto: “Un colega con una pequeña fábrica de cerámica ya está vendiendo su camioneta para intentar comprar un equipo generador de energía. Pero sabe que probablemente no funcione y lo pierda todo”.
Fruta importada más barata que la local
A la crisis turística y energética se suma una amenaza directa para los productores regionales: la competencia desleal con la fruta importada. “Una frambuesa que llega de Eslovenia cuesta 10% menos que la producida en una chacra de El Hoyo”, denunció Rechene. Esto golpea a productores de fruta fina de la comarca, que históricamente abastecían a ciudades como Bariloche.
Además, alertó sobre la llegada de fruta desde China a precios irrisorios. “Nuestros costos de producción son altísimos: energía, transporte, impuestos, salarios… no podemos competir”, lamentó.
Falta de política turística efectiva
Para Rechene, parte del problema es la desconexión entre las acciones promocionales y los resultados concretos. “Se gasta dinero en promoción, se viaja al exterior o a ferias dentro del país, pero no vemos el reflejo de esas campañas en la llegada de turistas a la comarca”, reclamó. Por eso, desde la Cámara de Comercio están exigiendo una reorganización de la estrategia turística y un apoyo claro al sector productivo.