Gabriel Caneo, dirigente de la Unión Cívica Radical (UCR), confirmó este lunes su decisión de renunciar a su precandidatura a diputado nacional, tras denunciar lo que calificó como maniobras proscriptivas y “mañas” dentro del proceso interno del radicalismo chubutense, en alianza con el PRO bajo el sello “Despierta Chubut”.
En diálogo con una emisora local, Caneo explicó que la falta de transparencia en la Junta Electoral del partido y la demora intencional en la entrega de documentación clave fueron determinantes para su decisión. Según relató, su equipo se presentó el lunes 7 de julio a las 18:30 horas para solicitar el reglamento, el acta constitutiva y otros elementos necesarios para la inscripción formal. Sin embargo, recién el viernes a las 14:36 horas recibieron por correo electrónico el acta y el reglamento, lo que les dejó menos de 48 horas para reunir los avales y completar los requisitos, algo que Caneo considera inviable.
“Se nos acortaron los tiempos para cumplir con todo. Fue una maniobra clara para obstaculizar nuestra participación”, denunció.
Además, apuntó contra el nuevo reglamento, que modificó el porcentaje de avales necesarios del 2% al 3%, y añadió una cláusula que exige que los presidentes de los comités departamentales avalen a los candidatos, lo cual consideró “antidemocrático y direccionado”.
Durante la entrevista, Caneo fue claro al señalar al presidente de la UCR provincial, Gustavo Menna, como responsable de estas maniobras. Según dijo, el hecho de que Menna no asistiera a una reunión clave celebrada el domingo con dirigentes del PRO —a la que sí acudió el titular de ese espacio— es una prueba de que “algo se quería evitar”.
“El radicalismo nació para dar internas, no para hacer internismo sucio”, sostuvo Caneo, visiblemente decepcionado por lo que considera un retroceso institucional.
Pese a todo, el dirigente aclaró que no se alejará del partido: “Esto no nos dobla. Vamos a seguir militando dentro de la UCR y construyendo una alternativa real para la provincia”, aseguró.