El Sindicato Regional de Luz y Fuerza de la Patagonia abrió este miércoles en Puerto Madryn su 47° Congreso General Ordinario de Delegados, que se desarrollará hasta el viernes 28 con la participación de representantes de Tierra del Fuego, Santa Cruz y Chubut. La apertura estuvo encabezada por el secretario general, Héctor Rubén González, junto al secretario adjunto, Juan Domingo Espinoza, y el Secretariado Regional.
El encuentro, que también incluye un Congreso Extraordinario, se presenta en un contexto político, económico y social considerado “de enorme complejidad” por la conducción sindical. González señaló que las discusiones de este año estarán orientadas no solo a revisar la tarea de cada secretaría, sino principalmente a definir líneas de acción para el futuro, ante los cambios profundos que atraviesa la Patagonia y el país.
Ejes de debate: reforma laboral, transición energética y desarraigo
El Congreso abordará temas centrales para el sector, como la reforma laboral, cuyo impacto será analizado por especialistas convocados para exponer sobre los riesgos y desafíos que enfrentan trabajadores y trabajadoras de la región.
También se tratarán problemáticas históricas vinculadas al desarraigo, y se presentarán avances y proyectos de la Fundación del sindicato sobre transición energética, un área estratégica para la Patagonia.
“Vivimos día a día dificultades que atraviesan tanto a las y los trabajadores como a los gobiernos locales. Por eso insistimos en la necesidad de estar más unidos que nunca para buscar soluciones”, expresó González.
Preocupación por el futuro productivo y geopolítico de la Patagonia
Durante la apertura, el secretario general se refirió a la incertidumbre que atraviesan sectores clave como las represas en Santa Cruz, paralizadas en medio de tensiones internacionales, y la cuenca carbonífera, atravesada por conflictos laborales y desafíos de carácter geopolítico.
González también manifestó preocupación por la creciente presencia extranjera en la región y la posible pérdida de soberanía en territorios estratégicos:
“Nos preocupa la ocupación territorial. Lo venimos planteando hace años. La Patagonia es un enclave geopolítico fundamental y no se está mirando con la seriedad que requiere”.
El dirigente advirtió sobre la necesidad de mantener una mirada crítica ante presiones económicas externas y remarcó que “no se puede hablar de desarrollo si no se garantiza la defensa del territorio y de los recursos naturales”.
Unidad y trabajo en un escenario social adverso
González enfatizó que la prioridad del sindicato es proteger los derechos laborales, sostener las fuentes de trabajo y acompañar a las comunidades patagónicas en un contexto signado por la inflación, la falta de inversión y los cambios en la matriz productiva.
“Hay que dejar de confrontar por confrontar. La gente necesita soluciones reales. El 2026 será un año difícil y debemos estar preparados”, afirmó.
En paralelo al Congreso, este miércoles por la tarde se inaugurarán en Puerto Madryn nuevos consultorios de la obra social, que según González beneficiarán tanto a afiliados como a otros sindicatos de la región. También se anunció la reciente adquisición de equipamiento para un laboratorio propio, con el objetivo de mejorar la prestación médica ante un sistema cada vez más costoso y desfinanciado.
Mirada hacia adelante
El 47° Congreso de Luz y Fuerza concluirá con un documento político que sintetizará los lineamientos de acción para los próximos años, en un escenario que el sindicato define como “cambiante, imprevisible y desafiante”.
“El pasado ya lo conocemos. Hoy tenemos la obligación de pensar el futuro y defender la Patagonia con más convicción que nunca”, sostuvo González.



