La Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP) suscribió en Puerto Madryn una Carta de Intención junto a organismos públicos, privados y del ámbito científico, con el objetivo de impulsar acciones conjuntas para la gestión responsable de residuos pesqueros y la promoción de prácticas sostenibles en el sector.
El acuerdo fue rubricado por el gerente de CAPIP, Luis Pérez, quien participó del acto junto a Hernán Duplaa, secretario de Ecología y Protección Ambiental de la Municipalidad de Puerto Madryn; Diego Taboada, presidente del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) y coordinador del Proyecto MaRes; y María Soledad Schulze, directora del Observatorio del Sistema Pesquero Argentino (OSPA).
Objetivos principales
El documento firmado resalta que la gestión adecuada de los residuos pesqueros es un desafío estratégico para la ciudad, el sistema portuario y la protección del ambiente. Para ello, las instituciones acordaron trabajar en tres ejes centrales:
-
Fortalecimiento institucional, acompañando el programa Puertos Azules como referente en buenas prácticas de sostenibilidad portuaria.
-
Trazabilidad y manejo portuario, mediante mecanismos normativos y voluntarios que permitan mejorar el control de los residuos.
-
Promoción de la economía circular, valorizando subproductos y plásticos derivados de la actividad pesquera.
En este marco, se anunció también la Jornada de Gestión y Economía Circular, a realizarse en noviembre de 2025 en Puerto Madryn.
Un compromiso colectivo
Desde CAPIP destacaron la importancia de este paso, que “ratifica el compromiso del sector pesquero con la sostenibilidad y la innovación”. El documento establece además que las partes coordinarán esfuerzos técnicos y políticos, intercambiarán conocimientos en un marco de respeto institucional y difundirán los avances en foros nacionales e internacionales, como el previsto en Vigo, España.
Vigencia del acuerdo
La Carta de Intención tendrá una vigencia de cinco años, con posibilidad de prórroga automática, y aunque no implica compromisos comerciales o financieros, representa un gesto político y social de cooperación interinstitucional.