La decana de la Facultad Regional Chivilcoy de la UTN, Diana Bohn, expresó su preocupación y descontento tras la media sanción en el Senado de la ley de financiamiento universitario. Aunque reconoció que fue un paso positivo, remarcó que el proceso está teñido de incertidumbre, manipulación política y desatención a las necesidades reales del sistema universitario.
“Claramente estamos viendo que la mayoría de los legisladores están actuando como quiere el pueblo, sosteniendo derechos”, comenzó diciendo Bohn, aunque también aclaró que la situación general dista de generar tranquilidad. “Esto agota. Es como un juego siniestro, en algo que debería fluir naturalmente cada fin de año para poder planificar el próximo ciclo lectivo”, agregó.
Según la decana, el proceso legislativo para garantizar el financiamiento adecuado de las universidades no solo es lento y desgastante, sino que también responde a maniobras políticas que “juegan con las expectativas de la gente”. Bohn alertó sobre los efectos inmediatos: sueldos por debajo de la inflación, falta de recursos para sostener servicios básicos, y docentes que deben asumir múltiples trabajos para poder vivir.
“Hoy tenemos docentes con hasta cinco trabajos. No es que se cerraron las universidades, pero es una forma de ajustar secando el sistema”, denunció.
También enfatizó el peligro de que, aun con la ley sancionada, el Poder Ejecutivo la vete o no la implemente, lo que podría desencadenar una ola de demandas judiciales contra el Estado. “Si no se cumple la ley, vendrán juicios por parte de todos los que integran las universidades. Es grave lo que viene después”, advirtió.
Además, Bohn cuestionó la falta de coherencia en el comportamiento de algunos legisladores, quienes cambian su postura en lapsos muy breves. “Parece que hay una dualidad de criterios que deja muchas dudas. Un día levantan la mano por una causa justa, y dos semanas después se oponen a lo mismo”, expresó, en referencia a la votación sobre temas como discapacidad y jubilaciones.
En el tramo final de la entrevista, también se refirió a la incertidumbre sobre organismos nacionales de ciencia y tecnología, y la falta de mantenimiento en rutas nacionales. “Todo esto muestra un abandono del Estado, especialmente hacia quienes no tienen poder adquisitivo. Es una situación muy preocupante que se vive a nivel país”, dijo.
A pesar del panorama crítico, Bohn destacó que desde la UTN siguen trabajando con compromiso, generando recursos propios a través de servicios y capacitaciones, y manteniendo el diálogo institucional. “Seguimos con el mismo norte: sostener la universidad pública y de calidad”, concluyó.