En el marco de las vacaciones de invierno, una de las actividades más tradicionales para las familias argentinas —salir al cine y luego cenar afuera— se ha vuelto considerablemente más costosa. Según un informe de la consultora Focus Market, una salida típica para cuatro personas puede alcanzar los $127.700, lo que representa un aumento interanual del 60% respecto al invierno de 2024.
El desglose del gasto incluye:
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4 entradas al cine: $56.800 (en 2024 costaban $34.000).
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4 combos de snacks (2 baldes de pochoclo, 4 gaseosas medianas y 2 golosinas): $37.900 (en 2024 costaban $22.015).
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4 combos de hamburguesas (con papas y gaseosas): $33.000 (en 2024 costaban $23.700).
Este aumento refleja el impacto de la inflación acumulada durante el último año, sumado al encarecimiento de los productos en entretenimiento y gastronomía. Para muchas familias, esta salida recreativa —habitual en recesos escolares— se convierte en un lujo si no se aprovechan descuentos o promociones.
“Estamos frente a una pérdida del poder adquisitivo del entretenimiento familiar”, advierte Focus Market, señalando que el gasto por persona para una noche de cine con cena ronda hoy los $31.925. En ese sentido, el informe pone en evidencia la necesidad de que los consumidores comparen precios, busquen días promocionales y evalúen alternativas más accesibles.
La salida al cine, que solía ser una opción intermedia entre el entretenimiento hogareño y las salidas más costosas, está empezando a competir en precio con otras experiencias premium, lo que podría modificar los hábitos de consumo durante estas vacaciones de invierno.
