Tras la detención de cuatro personas acusadas de secuestrar, torturar y abandonar a un hombre en un canal de riego. El hecho, que ocurrió el 11 de julio en el barrio Inducom, fue calificado por la fiscal general Julieta Gamarra como un intento de homicidio con claros vínculos con el narcotráfico.
Según explicó Gamarra en una entrevista radial, la víctima fue interceptada por tres hombres y una mujer, con quienes mantenía vínculos relacionados al tráfico de drogas y deudas por estupefacientes. Al llegar al lugar de encuentro, ubicado en un edificio del barrio Inducom, el hombre fue golpeado, maniatado, torturado y rociado con nafta. Incluso fue quemado con un cuchillo caliente en el párpado.
“No estamos hablando de un ajuste improvisado. Lo estaban esperando, lo interceptaron apenas llegó, y lo torturaron por más de media hora buscando información sobre drogas y otras personas involucradas”, detalló la fiscal.
El horror: golpes, fuego y abandono en un canal
Los agresores no conformes con la brutal golpiza, colocaron a la víctima maniatada dentro del baúl de un vehículo y la trasladaron hasta un canal de riego ubicado entre las calles Centenario y Rawson. Allí lo arrojaron, le dispararon y, creyendo que había muerto, se alejaron del lugar. Sin embargo, al notar que aún se movía, regresaron y efectuaron nuevos disparos.
La víctima fingió estar muerta para sobrevivir. Posteriormente, logró caminar hasta un área poblada y pedir auxilio. Fue asistido por un móvil policial, a cuyos agentes identificó de inmediato a los agresores.
Los detenidos: dos hermanos, una pareja y un expolicía
Están detenidos e imputados Nelson Pérez, Gabriel Pérez, Martín Paves y Guadalupe Patiño, todos mayores de edad. Dos de ellos son hermanos; uno es expolicía exonerado en 2021 por vínculos con hechos delictivos. La mujer es pareja de uno de los implicados y fue sindicada como testigo pasiva de los hechos, sin intervenir para impedirlos.
El vehículo utilizado por los agresores para transportar a la víctima fue secuestrado en un operativo. En los allanamientos se encontraron también elementos vinculados al narcotráfico: marihuana prensada y cogollos, lo que refuerza la hipótesis de que el conflicto se originó por temas relacionados al tráfico de drogas.
La víctima, también detenida por otra causa
En una vuelta inesperada del caso, la fiscal confirmó que la víctima tenía un pedido de captura vigente por una causa de estafas en Puerto Madryn, por lo que también permanece detenida a la espera de la audiencia correspondiente. “Esto no le quita gravedad al hecho. Fue una brutal tentativa de homicidio, y lo ocurrido debe ser juzgado con el máximo rigor”, sostuvo Gamarra.
Prisión preventiva y posible competencia federal
Los cuatro acusados permanecerán con prisión preventiva por seis meses, según lo ordenó la jueza interviniente. La decisión se basa en la gravedad del hecho, el riesgo de fuga y el posible entorpecimiento de la investigación, ya que todos los imputados vivían en el mismo edificio y se deshicieron de sus teléfonos móviles antes de ser allanados.
Consultada sobre la posible intervención del fuero federal, la fiscal Gamarra aclaró que los delitos principales —tentativa de homicidio, privación ilegítima de la libertad y tortura— serán investigados por la justicia provincial, mientras que los aspectos vinculados al narcotráfico podrían derivarse al fuero federal.