La industria metalúrgica en Argentina enfrenta un momento crítico, marcado por conflictos salariales, falta de homologación de paritarias y una preocupante paralización productiva, según denunció Marcelo Arrivillaga, Secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Seccional Puerto Madryn, en una reciente entrevista.
Arrivillaga calificó como una “vergüenza” la intervención del Gobierno nacional en las negociaciones salariales que vienen sosteniendo los trabajadores metalúrgicos. “Hace más de un año que estamos con procesos paritarios inconclusos”, explicó, y detalló que, a pesar de haber acordado incrementos salariales en diciembre de 2024, el Gobierno no homologó dichos aumentos. “Incluso cuando el sindicato bajó las expectativas para facilitar la homologación, el Gobierno siguió dilatando el proceso”, denunció.
El dirigente sindical expresó su preocupación por el impacto de esta falta de homologación en la economía de los trabajadores: “Es una verdadera pesadilla para los empleados, porque no saben cuánto van a cobrar ni cómo se van a computar los aumentos pendientes”. Según explicó, el porcentaje pendiente corresponde a un 12% de recomposición salarial que debía cubrir el período de enero a abril de este año.
Más allá del conflicto salarial, Arrivillaga alertó sobre la paralización que atraviesa la industria metalúrgica, afectando principalmente a las pymes del sector. “Al no haber obra pública, el mercado se paraliza. Las empresas que fabrican maquinaria para el campo, repuestos para vehículos o aberturas de aluminio ven cómo sus pedidos se detienen”, dijo. Además, enfatizó que los costos fijos siguen aumentando, como por ejemplo las tarifas eléctricas, lo que complica aún más la situación.
El secretario general advirtió que, pese a que hasta ahora se han evitado despidos masivos y suspensiones, la realidad podría empeorar en los próximos años si no se toman medidas urgentes. “A nivel nacional ya se han perdido cerca de 50.000 puestos de trabajo genuinos en la industria, y esto puede profundizarse”, señaló con preocupación.
Finalmente, Marcelo Arrivillaga envió un mensaje a los trabajadores metalúrgicos y a la comunidad: “Estamos atravesando un momento complicado y complejo, pero no vamos a dejar de trabajar ni de luchar para salir adelante”.