Un médico traumatólogo de la ciudad es investigado por un nuevo hecho de presunto abuso sexual simple ocurrido dentro de su consultorio. La denuncia fue radicada por una paciente que declaró haber sido víctima de tocamientos inapropiados durante una consulta médica. El caso se encuentra a cargo de las fiscales Angélica Carcamo y Daniela Carrizo, quienes confirmaron que en las próximas horas se realizará la apertura formal de la investigación.
Según informaron desde el Ministerio Público Fiscal, los hechos denunciados habrían ocurrido en marzo de este año. Como parte de la investigación, se llevaron a cabo allanamientos en el domicilio del médico y en el centro de salud donde atiende, con el objetivo de secuestrar computadoras, celulares y documentación clínica. El centro médico colaboró con la entrega de los registros institucionales, aunque se aclaró que las historias clínicas estaban bajo control exclusivo del profesional.
Este nuevo caso se suma a otras dos causas previas por abuso sexual contra el mismo médico, que se encuentran en instancia de debate. En una de ellas, la defensa intentó acceder a una suspensión de juicio a prueba (probation), pero la Fiscalía se opuso y la jueza a cargo, Mariana Reyes, rechazó el pedido tras escuchar a las víctimas, quienes también manifestaron su negativa. Ahora, la Cámara Penal deberá revisar esta decisión en una audiencia programada para el 27 de agosto.
“El profesional aún sigue ejerciendo porque no hay una sentencia condenatoria firme”, explicó la fiscal Carcamo. “Pero estos abusos tienen un plus, por tratarse de hechos cometidos en la intimidad de un consultorio médico, donde el paciente deposita confianza plena en el profesional”.
Las tres víctimas son mujeres mayores de edad, y los testimonios describen un patrón de conducta similar por parte del profesional, quien habría aprovechado su rol médico para realizar tocamientos sin justificación clínica.
El delito de abuso sexual simple contempla penas de 6 meses a 4 años de prisión. Aunque el médico no posee antecedentes penales registrados hasta la fecha, la Fiscalía analiza como agravante la extensión del daño emocional sufrido por las víctimas, quienes se encuentran bajo seguimiento psicológico y con fuertes secuelas por los hechos denunciados.
Finalmente, desde la Fiscalía se señaló que no existen antecedentes recientes en Puerto Madryn de un caso similar que involucre a un profesional de la salud. También se abrió el interrogante sobre la necesidad de que el Colegio Médico establezca medidas preventivas más estrictas ante casos en investigación.
“Sería interesante que el Colegio Médico revise si debería suspender preventivamente a profesionales investigados por delitos sexuales. Es un debate necesario”, concluyó la fiscal.
