Desde el PRO, fue la diputada Silvia Lospennato quien primero respondió con contundencia. “Señor presidente, Ficha Limpia no era un proyecto suyo, tampoco era un proyecto mío, aunque lo haya presentado por primera vez en 2016 y lo haya representado ininterrumpidamente desde entonces. Ficha Limpia es un proyecto ciudadano”, dijo, en un mensaje directo difundido a través de redes sociales.
Lospennato, una de las impulsoras históricas del proyecto, enfatizó que la ley contaba con un respaldo mayoritario de la sociedad y acusó al gobierno de no haber hecho lo necesario para garantizar su aprobación. “Lo que sí era suyo, presidente, era la responsabilidad de que saliera la ley, y no salió. Yo le creí, muchos le creímos, pero todavía hay algo peor que mentir: creerse las propias mentiras”, sentenció.
Mauricio Macri también se sumó a la respuesta y calificó los dichos de Milei como “una alucinación seria”, negando rotundamente la posibilidad de un acuerdo con el kirchnerismo. “Un pacto con Cristina Kirchner es lo menos creíble que escuchamos en años. No lo creen los kirchneristas, no lo creen los macristas, no lo cree ningún argentino”, apuntó el exmandatario.
La polémica reaviva el debate sobre los límites del apoyo legislativo que el oficialismo puede esperar para sus proyectos, incluso aquellos que coinciden con demandas sociales de alta aceptación. “Pese a los ataques y agravios, estoy en paz. Porque tengo la certeza de que la verdad siempre sale a la luz”, cerró Lospennato. “Somos una mayoría los argentinos que queremos vivir en un país sin corrupción, que decimos no a los pactos de impunidad”.