El Ministerio de Defensa anunció una transformación del Servicio Militar Voluntario (SMV), que dejará de ser una instancia de instrucción básica para convertirse en un programa integral de formación destinado a jóvenes de entre 18 y 28 años. La medida busca fortalecer el perfil profesional de quienes eligen incorporarse a las Fuerzas Armadas, y, a la vez, brindarles herramientas útiles para su inserción en el mundo laboral.
La reforma apunta a preparar soldados no solo para la defensa del país, sino también para enfrentar los nuevos desafíos sociales y ambientales. En esa línea, el nuevo SMV incluirá un tramo educativo intermedio que permitirá a los jóvenes completar sus estudios obligatorios. Además, el programa prevé la capacitación y certificación en oficios con validez civil, para asegurar que las habilidades adquiridas durante el servicio tengan aplicación fuera del ámbito militar.
“En un mundo cada vez más desafiante, la defensa de la Nación requiere mujeres y hombres preparados, con vocación de servicio y herramientas para enfrentar cualquier adversidad”, señalaron desde el Ministerio a través de sus canales oficiales.
La modificación también contempla una ampliación de las semanas de instrucción y una mejora en los contenidos vinculados a defensa, asistencia en emergencias y respuesta ante catástrofes. De esta manera, el SMV se consolida como un eslabón estratégico dentro del sistema nacional de respuesta ante emergencias, formando soldados capaces de actuar tanto en escenarios bélicos como en contextos de desastre natural o crisis humanitaria.
El nuevo esquema apunta a mejorar la experiencia de quienes eligen servir a la Patria, ampliando sus horizontes formativos y facilitando su transición al ámbito civil una vez finalizado el servicio. Según explicaron desde el Ministerio, se busca “formar soldados que defiendan la Patria y el futuro de quienes eligen servirla”.
