El Ministerio de Justicia de la Nación anunció oficialmente la puesta a disposición de un edificio de más de 5.000 metros cuadrados ubicado en el predio de la Ex ESMA para ser utilizado por fiscales federales. Esta medida se enmarca en la implementación del nuevo Código Procesal Penal Federal, que entrará en vigor el próximo 11 de agosto en la jurisdicción de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El inmueble, que anteriormente estaba destinado a programas de índole ideológica y actividades políticas partidarias, será reconvertido para reforzar la infraestructura judicial. Según el comunicado, el objetivo es “contribuir de forma directa a la lucha contra la inseguridad”, una de las principales banderas del gobierno de Javier Milei.
El texto difundido por el Ministerio de Justicia señala que esta decisión responde a la voluntad presidencial de eliminar “gastos innecesarios”, achicar el Estado y redirigir los recursos hacia áreas estratégicas. En este caso, apuntan a consolidar “una Justicia rápida, eficaz y al servicio de los argentinos”.
Además, desde la cartera judicial remarcaron que la iniciativa busca brindar a jueces y fiscales las herramientas necesarias para actuar con mayor eficiencia en sus tareas.
La utilización de un espacio en la Ex ESMA, sitio emblemático por haber sido un centro clandestino de detención durante la última dictadura militar, podría abrir un nuevo debate en torno a los usos y resignificaciones de los espacios de memoria.
