La inminente llegada del fin de semana largo más extenso del año ya se hace sentir en las calles, en las redes sociales y en los planes —o la falta de ellos— de miles de habitantes de la provincia. Con una duración que se extiende hasta cinco días en algunos casos, este feriado XXL despierta expectativas, pero también preocupaciones.
Una encuesta informal lanzada en redes sociales arroja una tendencia clara: el 60% de los participantes aseguró que “no hay plata” para aprovechar los días libres viajando o realizando actividades recreativas. Mientras tanto, un 30% manifestó que el fin de semana largo “les complica la vida”, ya sea por cuestiones laborales, familiares o de organización. Tan solo un 10% dijo tener intenciones de viajar.
Estos datos reflejan el contexto económico actual, donde la inflación, la pérdida del poder adquisitivo y el aumento del costo de vida han limitado las posibilidades de disfrute para gran parte de la población.
Por otro lado, los operadores turísticos de la región afirman que, si bien hay movimiento, las reservas están por debajo de lo esperado.
Sin embargo, algunos rubros podrían beneficiarse: gastronomía local, entretenimiento urbano y pequeños comercios esperan un leve repunte durante los días feriados, sobre todo si el clima acompaña.
Más allá de los números, el feriado largo también abre espacio para el descanso y la reflexión, en un año que, para muchos, viene siendo cuesta arriba. Quienes no puedan viajar, buscarán otras formas de desconectarse o simplemente tomar un respiro en la rutina.
